RECOMENDACIÓN DE LIBROS
por Roberto Peña,
Libros .aparte
Allegro Politburó nª6
"Escrito en la Arena"
Sylvia del Valle
Prologado por Juvencio Valle
Ediciones Asociación Chilena de escritores, (1968) primera edición 99 pags.
diagramación e ilustraciones de Araya Bustos
$3000 (mailto:libros.apartegmail.com) libro usado
Como librero confieso mañas de este oficio: detesto a esas personas que están en alguna conversación rutinaria con algún amigo y toma algún libro o más de uno y mueve las paginas de un lado a otro y ni siquiera lo ojean. Es verdad que podemos ser algo quisquillosos pero, amamos y respetamos los libros que vendemos.
“…Con una poesía serena, con cierto dejo desencantado o escéptico propio de quien viene un poco de vuelta, sin perder la alegría ni la esperanza, de los azares y avatares que ofrece la vida. Detrás de cada uno de estos versos, rítmicos, bien construidos, dueños de una rara presión inteligente, hay una diosa que sonríe y mantiene el decoro de su verbo” (Luis Merino Reyes)
Encontré muy acertado el comentario. Al terminar el libro no sabía qué decir; necesitaba saber más de la autora, tenía tantas ideas e imágenes en la cabeza y recordé que siempre en las solapas encuentras cierta información obre el autor. Leí lo que decía y fué tal mi sorpresa al ver mucha de mis impresiones plasmadas en esas honestas palabras de Luis Merino Reyes, así que busque en el diccionario de la literatura chilena de Efraín Szmulewicz.
La primera poetisa en mi columna, “Quien disfrute de oído absoluto para la poesía entenderá esta proeza y nunca más confundirá a la bella Sylvia del Valle con la musa de un vate”. Así tengo en mi mano su primer libro, “Escrito en la Arena” (1968). Después, ella escribió tres más de poesía: “Sangre Otoñal” (1984), “Vecindario de estrellas” (1986) y “Por tierras del romance” (1994) y el inédito ,“Este querer besar el cielo" (1972). Se casó con el actor Gerardo Grez y en su poema “Al portal de mi Casa” le explica:
Al portal de mi Casa
A veces me preguntas
por qué no escribo claro,
si temo a las palabras
a decir sol, cuando es sol
o día, cuando es día
Pero yo sé muy bien
que cuando digo pan,
estoy diciendo: sol,
y si nombro la noche,
es porque invoco el día.
Que diciéndote hoja
te estoy sintiendo árbol,
y penando en los hijos
digo nido, no niño.
En cambio, hogar: es barco
y amor: lluvia salada.
Alegría: una flor,
tristeza: las raíces.
La dulzura: una fuente,
y las campanas: risas.
Un espejo: las lágrimas,
y la muerte: un reloj.
Puedo llamarte amado,
compañero o esposo,
pero prefiero: casa
y al corazón: Portal
Las estrellas: gaviotas
pensamientos: hoguera.
Arena: las palabras
y nuestra vida: el mar."
En 1971 fue destinada a la Dirección de Cultura de la presidencia de la república, siendo jefe administrativo.
Concierto Burocrático
Ayer era yo misma, hecha tinta y papel,
el rostro con membrete de funcionaria,
los ojos dos letras mayúsculas
y el corazón tecleando su desencanto.
Ayer era yo misma….
(Es bueno mantenerse limpia y ser leal
como su propia sombra).
Ayer yo pregunté:
-¿Florecerá la jerarquía humana postergada?....
Y hoy repito:
-¿En qué caminos nos encontrará este invierno
con los bolsillos llenos de lluvia?...
Otros nombres, distintos rostros
y en la bullente colmena nada cambia.
El mismo corazón pronto a partirse,
las mismas tarjetas amarillas que desangran,
los mismos anhelos y ambiciones…
el mismo amor de viejos jardineros
para la nueva Planta.
Con serenatas epistolares
El Concierto Burocrático prosigue.
La cadena de notas y oficios
piadosamente interpretados,
se estira a través de las distancias.
Anónimos oyentes nos acompañan
en melodías escalonadas
-ansiedad-dolor-alegría…
y al compás de los “No ha lugar”
se derrumban las esperanzas.
En menguada eternidad nacen falsos dioses,
los escritorios florecen en fuego y sangre.
Cargados de leyes y decretos
los viejos expedientes
se quejan lastimosamente
y las solicitudes gotean negras lágrimas."
Con una portada digna, pero algo fría destaco mucho el trabajo del diseño. Araya Busto, quien ilustra algunos de los poemas, con una línea simple en su trazo pero coherente al texto; se destacan para mi gusto los de “Sueño de lluvia”, “Corazón de campana” y “El fantasma de un caracol”
NOTA: Leer en el baño es un hábito que puede ser inspirador pero egoísta y no por la lectura.


